Ermita de Nuestra Señora de Valdesalce

La ermita de Nuestra Señora de Valdesalce se localiza a 3 km de la población de Torquemada. Posiblemente fue la iglesia de algún despoblado medieval. Su nombre se debe a la patrona de Torquemada y al paraje donde se ubica. Se empezó a levantar en el siglo XIII pero sufrió modificaciones siglos posteriores. Está levantada en cantería.

Al exterior, se trata de un edificio que aglomera en sus muros diversas etapas constructivas: el ábside poligonal con vestigios góticos, donde había vanos ojivales, hoy cegados, separados por contrafuertes. La sacristía barroca del siglo XVIII, mandada edificar por los señores de la villa, los Medinaceli, como bien recuerda el escudo de armas de la fachada. Para llegar a la portada, primero hay que atravesar un pequeño atrio ajardinado, y después reciben al visitante las puertas de entrada, sobre las cuales se levanta orgullosa la espadaña. Además, consta de una puerta más ancho que las demás cuyo uso original se sigue conservando para salir en procesión, así como de un pequeño acceso al coro, hospedería, y otras salas.

Al interior, el espacio se encuentra dividido en tres naves separadas por pilares y la central sobrelevada. En el crucero una gran cúpula con linterna erigida en el siglo XIX ofrece cubierta. Además, guarda diferentes retablos, destacando uno barroco del siglo XVIII que cobija la imagen de la Virgen con el Niño entronizada y con la corona de Valdesalce.

San Marcos. 25 de Abril.

Se desarrolla en el Santuario de la Virgen de Valdesalce, se originó debido al carácter agrario del pueblo. Tenía el fin de pedir lluvias abundantes durante el mes de Mayo, pero su transcendencia fue aumentando llegando romeros y devotos de la Virgen de Valdesalce en busca de sus favores. Algunos de estos peregrinos llegaban desde muy lejos por lo que se institucionalizó la entrega de algunas viandas que les permitiesen recuperar fuerzas, naciendo así la costumbre de repartir pan y queso entre los peregrinos. Actualmente esta fiesta se sigue realizando todos los años y a la que acuden muchas personas de toda la comarca y de fuera de la comarca. Se realiza una misa en la ermita y tras la ceremonia se procede al reparto del «Pan y el Quesillo», en la que se reparten miles de raciones entre los asistentes